UNIVERSO FEMENINO
Me fascina cómo de una superficie vacía empiezan a surgir formas; el proceso de creación a través del dibujo, del color, de manchas y de pinceladas que acaban plasmando una idea, materializando un pensamiento y una forma de sentir. Y ese resultado es tan particular como únicas y distintas pueden ser las formas de ver una misma realidad. La mía gira alrededor de la mujer, un universo femenino naturalmente distinto, plagado de anónimas heroínas que - sin poderes mágicos- obtienen su fuerza del carácter, de la voluntad, de la generosidad, de la belleza sin artificios, de la sensibilidad, de la sensualidad, de la sexualidad...
A modo de AMAZONAS DEL SIGLO XXI, estas mujeres son capaces de protagonizar grandes gestas, capaces de realizar mil contorsiones para sí mismas y para los demás. Lúcidas, fuertes, nobles, valientes… pero también caprichosas, vanidosas, maquiavélicas incluso. Ambivalentes, equilibradas, o no, o solo a ratos; a estas luchadoras incansables que se exponen a la intemperie de su vida con estoicismo, me gusta imaginarlas como una fortaleza bien pertrechada y camuflada con el mejor de los maquillajes: una sonrisa, una caricia, un regazo siempre disponible y una sensualidad sin límites.
De ellas y de su visión del mundo, de eso se trata.
